La Guardia Civil en Gran Canaria en el marco de actuaciones encaminadas a la lucha para prevenir y perseguir el contrabando, fraudes y demás ilícitos, llevaron a cabo una operación en el marco de la Orden de Servicio Opson XIII sobre seguridad alimentaria el pasado mes de abril cuando observaron, en un establecimiento de alimentación, productos caducados y en mal estado previstos para su comercialización, poniendo en grave peligro la salud de todas las personas que compraban productos en el establecimientos, en la localidad de Las Palmas.

La Patrulla Fiscal y Frontera de la Guardia Civil de Santa María de Guía en el marco de la Orden de Servicio OPSON XIII sobre falsificación, adulteración, venta, etiquetado, comercio o distribución ilegal de productos alimentarios y fraude económico, observan durante una inspección en un establecimiento de alimentación gran cantidad de artículos caducados, en mal estado y sin etiquetados en idioma castellano.

Los alimentos intervenidos de carnes de vacuno, aves, pescados, verduras botes de soja, dátiles, pastas, arroces, conservas, batidos, snacks, leche y aceites ascendían a un total de los 5794 artículos.

Ante la gravedad de lo intervenido se pone en conocimiento del Área de Salud Pública del Gobierno de Canarias, donde inspectores del citado organismo realizan extracción de muestras de varios artículos para determinar si son aptos para el consumo humano, pudiendo producir en caso de ingesta, dolor de cabeza, diarreas, fiebre, náuseas y vómitos.

Los artículos incautados están a la espera de ser destruidos por ser considerados un perjuicio para la salud humana.

Por todo ello, se procedió a denunciar los hechos descritos ante la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias.

Según el Reglamento núm. 852/2004 del Parlamento Europeo que regula lo relativo a la higiene de los productos alimenticios, es un objetivo fundamental de la legislación alimentaria lograr un nivel elevado de protección de la vida y salud de las personas.