Los órganos judiciales de Canarias registraron en el tercer trimestre de 2023 la tasa más alta del país de demandas de disolución matrimonial por cada 100.000 habitantes, como sucede de forma ininterrumpida desde diciembre de 2019.

El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha hecho público este lunes los datos de su servicio de estadística correspondientes a entre julio y septiembre de este año, periodo durante el cual los juzgados civiles del archipiélago canario computaron 1.147 demandas de separaciones, divorcios o nulidades matrimoniales, un 0,9 por ciento menos que en el mismo periodo de 2022 (1.157).

No obstante, el dato implica una tasa de 51,8 rupturas de matrimonio por cada 100.000 habitantes, la más alta de España en el periodo de referencia, mientras que la segunda fue la de la comunidad valenciana (49,2), y la tercera, la de La Rioja (47,5).

La media nacional fue de 40,8 rupturas matrimoniales por cada 100.000 habitantes, es decir, 14 puntos por debajo de la media canaria. La comunidad con la tasa más baja fue País Vasco (33,2).