El pleno del Parlamento de Canarias ha aprobado este miércoles por unanimidad la Ley de la Presidencia y del Gobierno de Canarias, en la que por primera vez se reconoce el estatuto de los expresidentes autonómicos para que puedan ser requeridos para actividades propias de su condición, aunque se excluye que puedan percibir sueldos vitalicios.

La Ley de la Presidencia y del Gobierno de Canarias fija la organización, toma de decisiones, procedimientos y funciones de la Presidencia de Canarias y del Gobierno autonómico, así como el control parlamentario de su acción.

Sustituye a la que estaba vigente desde 1983, una norma de cuarenta años de antigüedad que necesitaba ser adaptada al nuevo Estatuto de Autonomía y a la legislación básica del Estado, según han explicado los portavoces parlamentarios.

En el artículo 19 se reconoce el estatuto de los expresidentes o expresidentas, que tendrán derecho al tratamiento de presidente o presidenta de por vida, a un lugar protocolario en los actos oficiales, a recibir apoyo del Gobierno en sus desplazamientos y a la utilización de los medios personales y materiales que se determinen.

Este estatuto será desarrollado en un reglamento por el Gobierno, pero la ley establece de forma expresa la prohibición de que en el mismo se incluya la percepción de remuneraciones o derechos económicos que no se encuentren vinculados a la realización de actividades propias de su condición.

Para reforzar este punto, el pleno admitió una enmienda “in voce” de Sí Podemos Canarias planteada por su portavoz, Manuel Marrero, en la que se prohíbe “la percepción de cualquier sueldo, remuneración o derecho económico vitalicio” con cargo al presupuesto por parte de los expresidentes.

Marrero reconoció que esta enmienda “parece redundante”, pero señaló que su grupo quería que quedara claro “qué se puede hacer y qué no” en el futuro desarrollo reglamentario del estatuto de los expresidentes, frente a algunas dudas que había generado la redacción original en algún periodista.

“No se puede legislar a golpe de titular” o de los medios de comunicación, “es un debate ficticio y forzado”, le replicó la diputada de CC Socorro Beato, quien subrayó que “nunca se planteó ni ha estado en el ánimo de nadie un sueldo vitalicio para los expresidentes”. Precisó que las posibles retribuciones previstas en la ley sólo estarían ligadas al desempeño de una función que les pueda ser encomendada.

Socorro Beato manifestó que Canarias no ha reconocido la experiencia de sus expresidentes, por lo que es importante reconocer su valor y aprovechar su experiencia y vocación de servicio asignándoles una función más allá de su mandato, como forma de dignificar el servicio público.

“Hay que dar visibilidad y dignidad a los expresidentes”, reivindicó por su parte Luis Campos, quien manifestó que la polémica sobre las retribuciones de los expresidentes es “artificial”.

La figura del expresidente ha sido “infrautilizada” y hay que aprovechar su caudal de conocimiento y experiencia“, una importante aportación para quienes les suceden, afirmó Campos.

Para Nira Fierro, del PSOE, reconocer la figura de los expresidentes como instituciones de esta tierra y aprovechar su trabajo y experiencia es una forma de “cuidar y mimar la política”.