La Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) ha desestimado el recurso de apelación interpuesto por el exalcalde de La Oliva, Pedro Amador, contra el procedimiento de la moción de censura que le apartó del bastón de mando en mayo del año pasado.

El Juzgado ya había dictado sentencia el pasado 20 de noviembre en la que rechazó su recurso de protección de derechos fundamentales. Amador impugnó la diligencia de la secretaria del Ayuntamiento de La Oliva, que el 2 de mayo de 2017 calificó favorablemente la verificación de firmas de los concejales que propusieron la moción de censura que lo desbancó como regidor municipal a favor del actual alcalde, Isaí Blanco (CC).

El Tribunal Superior de Justicia de Canarias confirma ahora lo que ya había avanzado el Juzgado en primera instancia. Así, recalca que la verificación de firmas fue un puro acto de trámite  que limitó sus efectos a posibilitar la convocatoria del pleno para el debate y votación de la moción de cesión.

La sentencia del TSJC deja claro que la validación de las firmas de los concejales que propusieron la moción de censura no supuso “el cese del recurrente como alcalde”, efecto que sólo se produce en el caso de prosperar la moción, como finalmente ocurrió.

“Si el demandante y hoy apelante mantiene la lesión de su derecho [de permanencia en el cargo público] debió recurrir o ampliar el recurso a la convocatoria y resultado del pleno municipal en el que se produjo la remoción”, destaca la sentencia del TSJC

El pasado 2 de noviembre de 2017, otro órgano judicial, el Juzgado número  3 de Las Palmas, ya había desestimado otro recurso del político contra los actos vinculados a la moción que derivó en su destitución.

Amador, número dos en la lista del Partido Progresista Majorero (PPMajo), que encabezó Domingo González Arroyo, se hizo con la alcaldía en enero de 2016, después de que se ejecutase la inhabilitación del conocido como 'Marqués de las Dunas'.

Así, Pedro Amador gobernó en minoría, con el respaldo de los concejales del PSOE y del Partido Popular, hasta que se formalizó y prosperó una moción de censura con Coalición Canaria, Nueva Canarias y Partido Progresista Majorero.