La entrañable Gran Tarajal de los sur-majoreros, especialmente para los de cierta edad, siempre fue "la capital" en la que encontrar los diferentes servicios que se ofrecían en la isla de tiempos pasados: desde sanidad - un médico y una farmacia - , enseñanza - una o dos escuelitas para niñOs (Don Luis y Don Antonio), y otra, mucho más modesta, con dos maestrAs, para niñAs (Doña Josefina y Doña María) . Servicios de seguridad/orden público: un guindilla o municipal (El "guardia Yoyo") y dos o tres guardia civiles al mando de un cabo; ninguno de los dos "cuerpos" disponía de cuartel ni vehículos para desplazarse... A pie y a dedo, como se les podía ver por los caminos...mosquetón al hombro y tricornio sobre la cabeza ... fuera verano o invierno... Y servicios portuarios, tan importantes o más que los del puerto de Puerto: los correíllos, los "santas", para pasajeros, que anclaban a una distancia de medio kilómetros, o así, del muelle, sirviendo los barquillos de pesca para llevar y traer pasajeros entre las naves y tierra firme... Y los barcos de cabotaje, para mercancías: piedra cal, cal, tomates, alfalfa, ganados, queso, pescado y marisco seco (El último, también podía ser en escabeche: en botellas con vinagre, ajo, laurel...)... ¡ Y pasajeros! Eran tan numerosos, o más, en en que en los apestosos y super mareantes y lentos "correillos". Y LOS COMERCIOS de Granta, especialmente los dos grandes establecimientos, que compraban de productos de la isla (huevos, queso...), y vendían de todo: lo mismo velas que petróleo para las cocinillas y quinqués, que aceite, vinagre, papas, millo... que telas, aperos, equipos para la casa... Esos dos destacados "híper", "súper" de esos años lejanos: finales de los cuarenta, los cincuenta, sesenta..., eran la famosa "Tienda del Muelle", propiedad de los hermanos González, D. Manuel y D. Antonio, conejeros ellos; y el comercio de Juanito Sosa... De todo el sur de Fuerteventura, incluyendo Jandía, acudían clientes a estos establecimientos, para abastecerse de lo más necesario e imprescindible- prácticamente no existían las compras "superfluas" -, como comida, ropa, calzado ... Casi exclusivamente, alpargatas... todo en lo mínimo, más barato, rudimentario ..., nada de lujos...