El Consorcio de Aguas de Fuerteventura (CAAF) reconoce en dos informes técnicos de los departamentos de producción y distribución que las infraestructuras de desalación y de conducción de agua potable en Fuerteventura están obsoletas y que por tanto hacen falta inversiones de forma urgente para garantizar el suministro de agua potable en toda la Isla.

El grupo Podemos en el Cabildo solicitó información a la Consejería de Aguas, que dirige Andrés Díaz Matoso, que a su vez encargó dos informes técnicos en los que se revelan las carencias del CAAF en cuanto a la producción, distribución, escasez de personal y mala gestión u organización, entre otras.

Uno de los informes está firmado por el ingeniero técnico del departamento de producción. En ese informe divide la situación por centros de desalación. El de Puerto del Rosario tiene capacidad para desalar 26.000 metros cúbicos al día pero hay dos módulos, que desalan 5.000, que tienen 28 años de antigüedad, cuando la vida media de estas instalaciones, según destaca el propio técnico, es de veinte años.

Por tanto, es necesario sustituir esos módulos e incluso aumentar la producción de forma urgente porque la demanda de agua potable ha crecido hasta un 35 por ciento más entre 2015 y 2018 “no solo debido al crecimiento de la población insular ,sino también a las pérdidas en red”.

“De continuar aumentando, se pone en grave riesgo el abastecimiento, no solo de Puerto del Rosario, sino de toda Fuerteventura”, señala el informe. En este sentido, destaca que se está a la espera de que el Cabido insular realice la contratación de la ejecución del proyecto de ampliación y mejora de la EDAM de Puerto del Rosario para dejar sin servicio a los dos módulos obsoletos y aumentar en dos mil metros cúbicos más los actuales, llegando hasta 28.000 al día.

Sin embargo, esto tampoco sería suficiente ya que, según este técnico, “se debería actuar en la búsqueda de financiación urgente para aumentar este centro de producción en 15.000 metros cúbicos al día para garantizar a corto plazo no solo el abastecimiento de Puerto sino de toda la Isla”.

Describe que de forma paralela se han ido tramitando las autorizaciones administrativas para ejecutar la tercera tubería de impulsión hasta los depósitos reguladores de La Herradura porque, aunque aumentara la producción no se podrían bombear más de 26.000 metros cúbicos diarios por falta de capacidad.

Este proyecto se ha trasladado ya a la Consejería de Aguas del Cabildo para que lo declare de interés insular, en base a la Ley del Suelo, ya que el Ayuntamiento de Puerto del Rosario no permite la instalación de la conducción de agua sobre suelo rústico de protección territorial.

El centro de producción de Corralejo solo abastece el casco urbano y tiene una capacidad de 4.000 metros cúbicos al día con dos módulos antiguos: uno tiene 26 años y el otro 18. El departamento de producción también considera urgente invertir para renovar estas instalaciones y está a la espera de que el Cabildo contrate la ejecución de esa mejora y se pase a producir mil metros más.

Además, la instalación debería conectarse para abastecer a todo el municipio de La Oliva, no solo al casco de Corralejo. En Gran Tarajal, la situación es muy parecida. También puede desalar 4.000 al día, con un módulo de 1.500 con 26 años y otro de 2.500 con once años. Se están redactando los proyectos para que el Cabildo contrate la mejora de la EDAM.

En este caso se añade que el CAAF no tiene medios humanos para atender a la explotación y mantenimiento tanto de las instalaciones de desalación como de las de generación eólica y que ese personal se está demandando desde hace más de cuatro años porque no se pueden hacer los análisis o estudios para poder obtener los datos estimados y planificar.

La distribución

Podemos también preguntaba por las roturas, pérdidas en red e incidencias. El índice de agua perdida en la red ha aumentado un diez por ciento en los últimos cuatro años y ya se acerca casi a la mitad del agua que se produce. El perjuicio económico que causa producir agua que no llega a los consumidores supera los 4,6 millones de euros al año para las arcas del Consorcio público.

La ingeniera técnico del departamento de distribución del CAAF señala en otro informe que no cuentan con toda la información sobre el número, naturaleza y zonas de las incidencias porque no hay un sistema que registre los problemas diarios. En Puerto del Rosario se elaboran partes de trabajo que pueden no estar completos, pero en el Norte no se hacen estos partes, a pesar de su insistencia y la del encargado. Ante “la dificultad y falta de tiempo” pide más personal para recopilar la información existente en esos partes.

El perjuicio económico que causa producir agua que no llega a los consumidores supera los 4,6 millones de euros al año para las arcas del Consorcio público

Para esta técnico, llevar a cabo este registro sería básico “para conocer y gestionar el departamento”. Se empezó a hacer un registro interno en Excel que recogía datos de este tipo, pero que no perduró en el tiempo. En el año 2015, se volvió a plantear esa necesidad con un sistema de formación geográfica y se visitaron empresas del sector, pero no se llegó a implantar. Según el informe, “no disponer de ese registro digital supone un labor minuciosa de recopilar partes diarios”.

El documento interno recoge quejas sobre la escasez y distribución del personal. El CAAF tiene a dos técnicos destinados, como labor prioritaria, a hacer expedientes administrativos, abandonando así la gestión como oficina técnica y la sección de control de fugas, que son dos de las labores “necesarias”.

La técnico señala que se consideró que el departamento a reforzar era el de producción y que ella manifestó su disconformidad con esa decisión porque era inviable llevar un departamento de distribución con solo dos técnicos. Esa decisión la tomó la presidencia del Consorcio en el año 2016 por decreto.

Sobre el coste estimado del mantenimiento de la red en aquellos puntos donde la infraestructura es obsoleta y con bajo rendimiento hidráulico, señala que no se puede evaluar porque no hay oficina técnica que elabore anteproyectos y haga trabajos de campo. Recopilando un mes al azar, julio de 2016, se contabilizaron 231 averías en ese periodo.

Señala, no obstante, que las redes que hay que cambiar de forma urgente son las redes generales (especialmente las de fibrocemento) de Puerto del Rosario, el tramo entre Herradura-Fimapaire, red de Godoy, actuaciones en El Time, Casillas del Ángel, Tefia, Guisguey y la ampliación de depósitos como el de La Oliva o Herradura.

El tiempo medio para solventar una incidencia o rotura es variable porque el departamento “no siempre dispone de los medios necesarios para llevar a cabo las labores diarias”, pero una avería de diámetro inferior a 90 milímetros tarda entre una y dos horas y de superior diámetro entre tres y siete, “llegando hasta 14 dependiendo del estado de la tubería”.

La técnico reconoce que ha habido problemas graves con las retroexcavadoras y con la disponibilidad de materiales, incluso con la carencia de medios humanos porque no hay personal para cubrir las guardias de fin de semana.

La ingeniera justifica que aporta los datos que puede aportar debido al sistema de gestión del CAAF y que está esperando a que se sumen medios humanos que colaboren con la recopilación de más información porque su labor, según las órdenes recibidas por parte del consejero, se limita casi en su totalidad a la redacción de expedientes y a la responsabilidad sobre los contratos.

“La forma de trabajar es de parcheo diario”

En un informe de marzo de este año, la técnico es contundente. Dice que la gestión del CAAF actualmente “no es notable” y que “la forma de trabajar es de parcheo diario”. “No nos permiten planificar ni organizar, trabajamos para salvar el día a día y garantizar que cada abonado tenga agua”. “Es tal el desconocimiento que ni siquiera disponemos de datos del agua distribuida por sectores, caudales mínimos, modelos matemáticos, registros de averías, etcétera, necesarios para trabajar en el rendimiento de la infraestructura”.