DESTACAMOS

Vía libre a 2.500 camas turísticas en hoteles de nueva construcción en Lanzarote

La apertura del hotel más grande de la Isla, en Playa Blanca, anuncia un posible nuevo repunte en la construcción turística, después de una década de parón

Saúl García 1 COMENTARIOS 14/07/2022 - 08:33

El crecimiento fue sostenido, aunque las estadísticas reflejan dos años con un salto importante: 2002 y 2006. En el primer año del siglo XXI había algo menos de 60.000 plazas turísticas, y unos años después había casi 12.000 más. Pero ahí se frenó. La moratoria preveía construir algo más de 10.000 plazas entre 2000 y 2010 y se construyó todo lo previsto en unos pocos años. Los tribunales anularon las licencias, pero los hoteles han seguido abiertos.

Hasta 2019 no se inauguraron los siguientes hoteles de nueva planta. Se habían reformado hoteles, se habían reconstruido, modernizado, incluso se habían ampliado las plazas por los sucesivos planes de modernización, pero no se había vuelto a edificar desde cero un nuevo hotel hasta que hace tres años abrieron el Lava Beach, el primer hotel de cinco estrellas de Puerto del Carmen, de la cadena Hibiscus, y el Cala Suites Hotel, en Playa Blanca, que respetó la moratoria.

Al parque alojativo insular se van a sumar ahora 1.440 plazas del que será el hotel más grande de la Isla, construido por los Hermanos Domínguez y gestionado por Barceló. En 2006 firmaron un convenio con el Cabildo para desistir de su construcción. Las plazas se limitaban a 862, pero ahora se ha sumado la edificación de otra parcela colindante.

A este hotel hay que sumar el anuncio de otro establecimiento nuevo, también en Playa Blanca, a cargo del Grupo Martínez. Serán muchas menos plazas, 110. El permiso lo aprobó de forma previa el Gobierno de Canarias en base a la Ley de Renovación y Modernización Turística de Canarias, que prevé este tipo de autorización para hoteles “que cumplan unos estándares de calidad edificatoria y del servicio”. Desde el Ayuntamiento de Yaiza apuntan que la licencia aún está en trámite y no ha sido concedida, y que no hay más solicitudes de licencias para hoteles.

El alcalde, Óscar Noda, señala, respecto a la posibilidad de que haya nuevos hoteles, que “para un destino de referencia como Yaiza es ideal mantener una planta alojativa de primer nivel, siempre que los proyectos cumplan con la normativa urbanística y los parámetros turísticos, sea para construir o para rehabilitar”.

El mismo grupo empresarial ampliará, esta vez en Puerto del Carmen, la capacidad del hotel boutique La Isla y El Mar en base al tercer Plan de Modernización Turística de esa localidad. En Costa Teguise debía haber abierto el año pasado, tal y como se anunció, el nuevo hotel de la cadena Gloria Thalasso & Hotels, que tendrá unas 700 camas en seis plantas. Había pedido permiso para hacer una playa artificial, pero se le denegó.

Si se abren estos cuatro nuevos hoteles, todos de nueva planta, serán 2.500 plazas. Pero podrían ser aún más. El alcalde de Teguise, Oswaldo Betancort, señaló en Radio Lanzarote que hay interés en construir en el ‘hoyo’, la construcción abandonada que hay entre la playa de El Jablillo y Las Cucharas, y también en retomar alguno de los proyectos de los esqueletos que se quedaron a medias, pero desde el Ayuntamiento de Teguise aseguran que, de momento, no se ha solicitado ninguna licencia.

¿Hay un nuevo repunte en la construcción turística? En otras islas parece que sí. En Tenerife, Sí Podemos Canarias en el Cabildo ha pedido que se apruebe una moratoria turística “ante los disparatados proyectos de infraestructuras turísticas que pretenden seguir destruyendo la Isla”, entre los que destaca el del Puertito de Adeje. En Gran Canaria, las instituciones insisten con el Siam Park, mientras que el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana acaba de desbloquear una gran bolsa de suelo en Meloneras para construir otros tres grandes hoteles. En Fuerteventura se están haciendo unas villas de lujo en Corralejo, se ha dado el primer paso para la ampliación del Atlantis Bahía Real y se acaba de aprobar el nuevo Plan de modernización de Caleta de Fuste.

Por su parte, mientras el Gobierno de Baleares ha aprobado una moratoria para nuevas plazas turísticas de cuatro años, el de Canarias ha descartado esa posibilidad. En Lanzarote, en la actualidad, según los datos del Registro general turístico del Cabildo, hay 71.552 plazas, que son 2.500 menos que en 2010.

Las ampliaciones en base a los planes de modernización aumentaron las plazas, pero las conversiones de complejos de apartamentos en residenciales las redujeron. Según la Encuesta de alojamiento turístico, hay 61.457 plazas abiertas, ya que hay un buen número de hoteles en plena reforma.

El Plan Insular de Ordenación de 1991 marcaba un techo de 108.678 plazas, así que quedan aún más de 37.000, más del doble de las que se construyeron en la última oleada. Hace años que se eliminaron de la contabilidad las plazas convertibles (sofás cama), que eran unas 12.000, así que Tías, que había superado su techo de plazas, volvió a quedar por debajo, con 26.417 y un margen de otras 5.000. El techo de Teguise sería de 21.203 y el de Yaiza de 20.677.

“Estamos abocados a frenar, ya pasó el momento de poder rebobinar”

Sin embargo, el propio Gobierno de Canarias, en las sucesivas legislaciones, reconoce implícitamente que desconoce el número de camas reales. Lo hacía en la Ley de renovación y modernización turística de Canarias de 2013, donde hablaba de la importancia de tener “el conocimiento preciso del número de plazas turísticas reales”, y la situación ha empeorado con la proliferación de las viviendas vacacionales.

El mismo registro del Cabildo dice que hay 3.784 plazas en este tipo de viviendas, de las que 1.237 estarían en Yaiza y 1.600 entre Tías y Teguise, pero es una cifra poco fiable. La realidad es que no se sabe bien cuántas plazas hay en viviendas vacacionales, pero probablemente tampoco en los hoteles o apartamentos.

Si algo demostró el eterno pleito contra las licencias es que una cosa es lo autorizado y otra lo construido. El Plan Insular de Ordenación de 1991 decía, sobre las posibles consecuencias de la expansión del mercado sin intervención para limitarla: “crisis multisectorial del conjunto del sistema insular cuando la oferta llegue a entre 75.000 y 100.000 plazas, inmigración masiva, crisis en la construcción, limitaciones graves de los sistemas generales, agresión al medio físico y crisis parciales del propio sector turístico”.

Decrecimiento turístico

“Antes había una estructura, unos registros del turismo, ahora nadie sabe quién viene a las viviendas vacacionales, hay una desregulación total y absoluta”, dice Antonio González Viéitez, economista y miembro del Gabinete científico del Consejo de la Reserva de la Biosfera.

Un sector de Podemos en Canarias pide que se apruebe una moratoria turística

En el libro que conmemora los 50 años de vida del Programa MaB (Hombre y Biosfera de la Unesco), Viéitez afirma que el ciclo del turismo barato ha llegado a su fin y “nos vamos a enfrentar a una etapa de importante retroceso”. En conversación telefónica, pone como referencia a Stendhal, que describe en la novela La Cartuja de Parma el paso de su protagonista, Fabricio del Dongo, por la batalla de Waterloo, pero sin saber que estaba en la batalla de Waterloo. Así compara el momento que vive Canarias respecto al turismo: “Estamos en un cambio de era y quienes vivimos este momento no somos capaces de ver que es un cambio de era”.

“No es una cuestión de opinión, estamos abocados, de forma obligatoria, a frenar -señala-, ya ha pasado el momento de poder rebobinar”, dice. Viéitez considera que el capitalismo exige crecimiento y competitividad, ni decrecimiento ni cooperación, así que desde el punto de vista del promotor hay una lógica a corto plazo: los hoteles nuevos quitarán los turistas al vecino de al lado. “El promotor piensa: ‘si soy capaz de poner un hotel mejor, me llevo a los turistas y detrás de mí, tierra quemada’”, añade.

Podemos señala desde el Cabildo que “en Lanzarote y en Canarias, en general, se debe iniciar con valentía el camino que nos señalan con éxito otros territorios: el del decrecimiento turístico y la renovación del modelo productivo”. Se refieren a Baleares o Barcelona: “Hay motivos ecológicos y sociales muy profundos para apostar por echar el freno y centrarnos en buscar otros nichos económicos más compatibles con la vida digna de nuestra gente. En Lanzarote, donde el turismo descontrolado ha venido acompañado de récords históricos de pobreza, empieza a ser urgente”.

Los consejeros de Podemos apuestan por el próximo Plan Insular, “que debe liderar la izquierda” y que tiene que basarse en estas premisas, “si queremos que Lanzarote tenga futuro y mantenga los buenos datos de empleo que trajo la reforma laboral de Yolanda Díaz”.

Viéitez también señala que hay que mirar hacia Baleares por su moratoria y la posibilidad de prohibir la venta de viviendas a extranjeros. Cree que el exceso de movilidad va a ser inimaginable y que los 15 millones de turistas cada año en Canarias no se van a mantener en el tiempo: “Hace falta un turismo de excelencia y seguimos con el turismo de garrafón”. “Hace falta –resume- que se sepa que estamos en la batalla de Waterloo para salir corriendo”.

Comentarios

¡mas ladrillo! que es la guerra

Añadir nuevo comentario